domingo, 25 de junio de 2017

El sueño más bonito que he tenido en meses al despertar se ha convertido en una pesadilla

Despertaba.
Aquella cama tan cómoda. Aquella luz tan tenue. Aquella isla de paz. Era temprano, estaba en el lugar más silencioso del mundo. Mi respiración y su respiración eran lo único que bailaba en el ambiente, todo lo demás estaba inmóvil. Los corazones latían muy despacio. Me di la vuelta lo más silente que pude mientras soltaba la primera sonrisa del día y me acerqué a ella. Miré, olí, escuché. saboreé y toqué. El color rojo, el mejor de los aromas, el silencio más armónico, el mejor de los bocados y la piel más suave del mundo.

Me desperté otra vez, «que cama más incómoda», pensé.

martes, 18 de abril de 2017

El idioma del sexo

- Fóllame.
Palpitaciones, respiración acelerada, sudores fríos, contracciones por todo el cuerpo... La miro y me mira, nos miramos. Miro su cuerpo, deseo su cuerpo, me como su cuerpo; bocado a bocado sigo el camino que quiero, quiero descender por sus curvas, morir en sus pechos, jugar con mis manos antes de llegar, quiero comerle el coño; los suspiros y los gemidos se suman al carnoso sonido de mi boca. Miro sus facciones pervertidas y ella mira las mías. Nos convertimos en animales poseidos por la lujuria. Los animales follan, los animales jadean, los animales gritan, se contorsionan, arañan, muerden, gimen, aúllan... los animales llegan al orgasmo tan rápido que caen rendidos uno encima del otro.
- Por supuesto.